No me dejes a solas
con el bendito silencio,
debajo del puente roto
persigo tu sombra.
Una danza con trampas,
engaña mi consciente
muy sutilmente.
Miro tu torbellino
contenido en otra era,
destruye la barrera
que separa las épocas
y traspasa sonoras leyendas.
No me dejes a solas
huye del destino
aléjate del vacío
¡No saltes!
¡No escapes!
del laberinto virtual
monstruoso, escondido,
Asterión está dormido
¡Crúzalo ya!
Cubre tu rostro,
termínalo de prisa.
No me dejes a solas
con el significado,
secretos arropados
con sábanas de seda
alumbran cual luz
tu oscuridad sin fin.
Sin caer en el hoyo,
el oculto mar
laborioso presume
su profundidad.
No me dejes a solas
con mis pensamientos,
tan traicioneros
y marrulleros.
Escaparon del calabozo,
un esquema borroso
fue su traición.
Las aves de los sueños
cantan el pasado
picotean los pinos
tragan los gusanos.
No me dejes a solas
en la vieja iglesia
sin puerta y sin cruz.
Lirios marchitos
en el cementerio
inocencias arrugadas
mojadas, empapadas
son ecos del futuro
retazos de destino
molinos sin viento
calabazas podridas.
No me dejes a solas
en la eterna noria,
oxidada está la memoria
del árbol en otoño.
Las hojas en el suelo
cubren el bosque
tenebroso, sin flores
en mi mano
grito tu nombre,
tan fuerte,
al centro de universo.
Photo by Simon Migaj on Unsplash
Acerca del autor
Escrito por: Juan Manuel Góngora Briceño
Soy de Mérida, Yucatán, México y soy un aficionado a la poesía, espero les guste. !Gracias por leerme!
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